Aprovecha al máximo las comidas para ahorrar y hacerte la vida más fácil. Encuentra ideas estupendas para comer al día siguiente, perfectas para llevar a la oficina o de lunch a la escuela.
¡Aprovecha al máximo tus comidas con un truco muy sencillo! En vez de cocinar solo para dos, haz comidas para cuatro o seis personas. Así, además de disfrutar más de la comida, también tendrás deliciosas sobras para el día siguiente.
Usa los filtros Cookidoo® para ajustar los tamaños de las porciones y encuentra las recetas que buscas. Es una manera muy sencilla de que cocinar sea más eficiente y práctico.
- Pollo asado: desmenúzalo y úsalo en fajitas, enchiladas, tacos o ensaladas. También puedes mezclarlo con una salsa de champiñones y comerlo con pasta.
- Boloñesa: echa las sobras en una pizza o mézclala con unos frijoles para preparar una especie de chili.
- Pescado: prueba a cocinarlo en hojaldres o hamburguesas de pescado.
- Arroz: puedes saltear el arroz con huevos, tocino, chícharos y otros ingredientes que tengas en casa.
- Puré de papa: úsalo para preparar gnoquis o croquetas, por ejemplo.
- Pan: puedes hacer pan rallado condimentado con hierbas y congelarlo o usarlo en budines dulces o salados.
- Verduras: al final de cada semana, comprueba qué verduras tienes aún en el refrigerador y prepara una ensalada o un omelette con un poco de todo.
Hay recetas, especialmente las que llevan carne y salsa, que ganan consistencia, sabor y textura un poco después de cocinarlas. Esto pasa con las sopas, las salsas con curry, los guisos y los estofados. Este fenómeno se produce no solo a causa de las reacciones químicas entre los alimentos y los condimentos, hay quien lo atribuye también a nuestros sentidos. Mientras cocinamos, nos acostumbramos a los aromas y sabores de la receta, pero al día siguiente nuestro olfato está más despierto y fresco y somos capaces de percibir mejor los sabores.